La auto-satisfacción que demuestran el Ejecutivo y la Concertación por la presunta baja de la delincuencia que denota la encuesta publicada por el Instituto Nacional de Estadísticas, INE, que más parece dedicado a la propaganda que a la estadística. Esta misma Empresa Fiscal es la que publicita las cifras oficiales de desempleo o inflación, a las que la ciudadanía cree muy poco.Contestes que consideramos que la encuesta no es verídica, porque constatamos que la gente está más asustada, que es más asaltada, que vive más encerrada, los lanzazos son el pan de cada día, las estafas son permanentes. Hemos construido una paradoja curiosa, la gente honesta debe permanecer presa en su casa para no engrosar la nómina las victimas de las bandas mafiosas.
La prensa, a la que culpa el ejecutivo de este aumento de las percepciones, no informa de casi ningún delito, solo alguna referencia a los de mayor espectacularidad y espectacularidad, porque ha sido fuertemente presionada por el ejecutivo, sea por las fuertes declaraciones culpándola realizadas por el Ministro Francisco Vidal o por el Sub-Secretario Felipe Harboe.
Las realidades superan largamente las apreciaciones del Gobierno, y eso, es evidente que la gente lo percibe, y por ello es perfectamente lógico que entre las Instituciones se encuentre la Policía de Carabineros, porque, aunque vemos a los maleantes en libertad, también somos testigos de cómo los persiguen, acorralan y detienen, para que otras instancias los liberen en pocas horas.
Entre las argumentaciones que hemos escuchado, auto-justificatorias por cierto del oficialismo es que estamos a la altura de los Estados Unidos o de Rusia en la cantidad de detenidos, como porcentaje de la población. Este análisis, que si bien es cierto tiene algo de verdadero, no implica un ataque a la delincuencia, solo demuestra que nuestra Justicia es muy lenta, los condenados son pocos.
Otros aseguran que es el resultado lógico de la extrema pobreza que se vive en la población, que hace que sea más rentable delinquir que trabajar, lo que gatilla esta situación. Este planteamiento se lo escuchamos a un dirigente y ex candidato a Senador Socialista, Gonzalo Martner, el que consideramos que insulta a esa enorme cantidad de pobres y honestos que hay en el país.
Nosotros pensamos que la delincuencia es un conjuntos de situaciones que se potencian, como las drogas y el alcoholismo, el ejemplo de las autoridades, la falta de leyes que encarezcan en delinquir, Jueces que no abdiquen de sus obligaciones, condiciones de vida infrahumanas, falta de esperanzas, todas, lamentablemente creadas o con grandes aumentos debido a la incapacidad que han demostrado en estos 17 años.
La delincuencia no ha bajado, esa no es una percepción nuestra, es una afirmación basada en la “encuesta” que hacemos todos los días a la gente con la que hablamos, en sectores medio bajos, así como aseguramos que los precios han tenido alzas que duplican, a lo menos, los índices oficiales y que el desempleo es gigantesco frente a la cantidad de desocupados que reconoce la administración de Bachelet.
